martes, 14 de agosto de 2012

caricia tibia






Para habituarme a los milagros nuestros de cada día.
esparcí  asombros en cada rincón de mi cuarto
abri la ventana y los espantos en puntillas de pie
se diluyeron ante la caricia tibia de la luz solar
No me cabe duda: hoy por un instante
 Sin saberlo supe ser amigo de la eternidad


2 comentarios:

  1. Eso sucede, es verdad. De pronto te das cuenta que eso te está pasando, qué bien que lo pudiste decir en estos versos.

    Besos!

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  2. Esparcir asombros en cada rincón del cuarto es una buena táctica para no olvidarse de que, a pesar de todo, la vida es bella... :)
    Hermosas palabras... :)

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