domingo, 2 de septiembre de 2012

buscando el nirvana





De tanto leer  escrituras sagradas
se olvido de mirar  los ojos de los que la rodeaban
De tanto desear lo ideal
los milagros pasaron desapercibidos a su costado.
Buscando el nirvana
produjo el infierno a sus semejantes

La generosidad de la primavera
 la acaricio pero ella estaba muy ocupada en sufrir
Absorta en su malestar
No supo apreciar la transparente nitidez de aquella mañana.

3 comentarios:

  1. Si nos regodeamos en el sufrimiento, nos perdemos las alegrías.
    Besos desde el aire

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  2. No entendió bien la espiritualidad.
    Abrazo.

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  3. A mi me vino fantástico leer un post que vos subiste sobre el dolor. Desde ese día me lo acuerdo y lo repito a menudo, YO NO SOY MI DOLOR.

    Gracias!

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