Es una
bendición que estemos aquí tomando café
filosofando de
bueyes perdidos /de vacas encontradas
eso quiere
decir que aún no hemos enloquecido
como le ha
pasado a muchos de nuestros amigos
(Aclaración:
no estoy hablando metafóricamente
ni me estoy
tomando una ingeniosa licencia poética
hablo de
manicomios de verdad y de amigos
que se
quejan de que no los vamos a visitar)
estirando los brazos
despreocupadamente
mientras en la esquina alguien hurga en la basura
y nosotros aquí leyendo ”Una
temporada en el infierno”
bebiéndonos de a sorbos( lejos de narcotraficantes
y culebrones cursis) este sabroso café colombiano
Es una
bendición que estemos aquí cenando
escuchando a Jagger cantar Satisfaction
una vez mas miro la taza
de café
como queriendo ver un poco mas allá
pero igual que en
un test de Rorschach
en el fondo solo
veo manchas sin sentido
una lagrima
cae en el café
y solo me cabe decir gracias
Sí.
ResponderEliminar(a todo, a los de los amigos en los manicomios y sobre todo a tanta bencición. Eso si, el café casi que me lo cambio por un te paquistaní con especies jajaja)
Xiana, ya vendra el poema del te paquistaní con especies...ya vendrá...más que una promesa es un hecho.
EliminarUn abrazo.
Yo comparto ese café y una buena conversación, aunque se derrame alguna lágrima.
ResponderEliminarBesos desde el aire
gracias por tu presencia y por compartir este café virtual.
EliminarSaludos
Vos siempre dando en la tecla con las canciones y los estados de ánimo!
ResponderEliminarCon qué gusto me tomaría un café y me pondría a divagar sobre los poemas de una temporada en el infierno, justo acabo de leerlo =P pero llama la vida desde alguna de sus esquinas y me tengo que ir =)
Hasta otro café!
Dar las gracias por nuestras vidas es un buen comienzo, en compañía de nuestros seres queridos, en compañía de ese café humeante que hace saborear nuestra vida a sorbos.
ResponderEliminarun abrazo.
Salud! Y como cantaba Silvio yo agrego que pido que me perdonen por éste día los muertos de mi felicidad, que también creo viene al caso...
ResponderEliminarAsi es la vida, mientras unos la disfrutan otros la sufren.
ResponderEliminarBonito poema.
Saludos.
El café, una de las fuentes de vida: en casa no somos nadie si él: en los malos y en los buenos momentos lo necesitamos: mis cafeteras padecen un alto índice de rotación.
ResponderEliminarUn abrazo, gracias por tu visita.